Cuando hablamos del dolor postoperatorio nos referimos a ese dolor presente en cualquier paciente como consecuencia de un procedimiento quirúrgico. Se caracteriza, normalmente, por tratarse de un dolor agudo, limitado en el tiempo, predecible y viable. Sin embargo, un mal control del dolor postoperatorio puede afectar de manera negativa a la calidad de vida de los pacientes.
Además de generar sufrimiento e insatisfacción, un mal manejo del dolor postoperatorio puede favorecer su cronicidad.
¿Qué factores afectan a la magnitud del dolor postoperatorio?
- Idiosincrasia del paciente: edad, experiencias previas, estado anímico, relación médico-paciente…
- Tipos de cirugías: técnicas quirúrgicas empleadas, maniobras, indicaciones médicas postoperatorias…
- Localización de la herida quirúrgica: una cirugía de tórax, por ejemplo, es mucho más dolorosa que una en el hemiabdomen superior o inferior.
- Etc.
La edad, el estado de salud del paciente, el preoperatorio o el sexo son factores que, como acabamos de ver, influyen de manera determinante en la magnitud del dolor postoperatorio. Por ejemplo, según la doctora Concepción Pérez, vocal de la Junta Directiva de la Sociedad Española del Dolor (SED), las mujeres jóvenes son más propensas a sufrirlo.
En cuanto al número de pacientes con dolor postoperatorio que lo sufren de forma persistente, tenemos que hablar de un 60%, según datos facilitados en 2017 por la SED. Una buena noticia es que, a pesar de su alta prevalencia, no se trata de un fenómeno inevitable.
El avance en técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas ha facilitado la recuperación postoperatoria del paciente y existen también nuevos dispositivos terapéuticos, desarrollados por especialistas médicos, que ofrecen un alivio adecuado del dolor agudo postoperatorio, evitando que este se vuelva crónico.
Consecuencias de un mal control del dolor postoperatorio
Un incorrecto manejo del dolor postoperatorio puede acabar ensombreciendo el éxito de la intervención quirúrgica. Asimismo, retrasa en el tiempo la recuperación del paciente, pudiendo alargar su estancia en el hospital y retrasando su reincorporación a su vida laboral y familiar.
Para evitar consecuencias mayores, como la cronificación del dolor, desde Avanfarma, División de Farmacia de Acuña y Fombona, una de las empresas líderes en el sector de la distribución médico-quirúrgica en España y Portugal, recomendamos el uso de ActiPatch®, un microdispositivo terapéutico, de uso personal, que funciona mediante campos electromagnéticos que penetran en la zona donde se localiza el dolor.
En el artículo ‘dispositivo de campos electromagnéticos para controlar sin medicamentos el dolor postoperativo’, ya explicamos los motivos por los que recomendamos su uso, pero destacamos los más importantes:
- No contiene fármacos y es muy fácil de usar. A diferencia de otros tratamientos prolongados en el tiempo, ActiPatch® resulta totalmente inocuo para la salud. Por este motivo, podemos combinar su uso con otros medicamentos sin que entrañe riesgo alguno para la salud.
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