La rodilla es una de las articulaciones que más peso corporal soporta, por lo que es más vulnerable a lesiones y molestias. Para controlar la hinchazón y el malestar, muchos usuarios recurren a los analgésicos o antinflamatorios, pero ¿qué ocurre cuando los medicamentos de venta libre no son suficientes? Además, la ingesta de estos fármacos no está exenta de riesgos y su abuso puede tener consecuencias graves para la salud. Para evitar que esto ocurra, ¿qué puedo tomar para el dolor de rodilla?
Por regla general, asociamos el dolor de rodilla a un esfuerzo o a una lesión. Sin embargo, esta dolencia puede tener distintas causas.
Por sus características anatómicas, la rodilla está expuesta a sufrir traumatismos directos e indirectos, pero también los procesos degenerativos e inflamatorios pueden ser los responsables de que esta articulación se vea afectada con frecuencia.
La artrosis, por ejemplo, es una enfermedad crónica degenerativa que está muy relacionada con el desgaste o el envejecimiento de las articulaciones (manos, caderas, rodillas…). Esta aparece cuando el cartílago que amortigua y facilita el movimiento de la articulación desaparece o se deteriora. Como consecuencia, los huesos que forman parte de la mano, de la cadera o de la rodilla empiezan a rozarse, apareciendo el dolor.
La rodilla es una articulación fundamental para moverse y cuando hay dolor, resulta realmente difícil llevar una vida normal. Además de no poder practicar deporte, actividades tan sencillas como andar o subir una escalera pueden convertirse en un verdadero problema.
Tratamiento para el dolor de rodilla
En ocasiones, el dolor de rodilla desaparece totalmente pasado un periodo de reposo. Respetar ese tiempo de descanso es importante. Sin embargo, hay personas que no pueden esperar y que necesitan acelerar el proceso de curación.
También puede darse el caso de que el dolor no cese con el descanso. ¿Qué es lo más recomendable en este supuesto? En el caso del dolor de rodilla, podemos decir que existen otros tratamientos que pueden resultar muy útiles.
Por ejemplo, los usuarios que han utilizado ActiPatch® para tratar esta dolencia han asegurado experimentar un gran alivio del dolor.
ActiPatch® es un microdispositivo de uso personal que emite campos electromagnéticos dentro del área terapéutica. A través de los impulsos electromagnéticos, consigue penetrar en la zona dañada, estimular las células lesionadas y reducir la inflamación, por tanto, el dolor, rigidez y limitación del movimiento disminuyen notablemente.
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